jueves, 7 de abril de 2011

Sí, me gustan las películas españolas ¿y qué?

A nadie le gusta el cine español. ¿Por qué?. ¿La gente dice que no le gusta porque lo dicen los “entendidos” o… porque en realidad no pasa buenos ratos viendo películas españolas?. Creo que en la sociedad actual el purismo y el “gafapastismo” están a la orden del día. Parece que si dices que te gusta el cine español no sabes de cine o directamente te tachan de inculto.

Soy de los que piensa que cada uno tenemos unos gustos muy particulares y que no debemos dejarnos influir por lo que digan terceras personas. Con el cine pasa lo mismo, ¿por qué he de sentirme avergonzado por ver una película como puede ser “Pájaros de Papel” en vez de ver una película de Stanley Kubrick?. Ya sé que no es una película “de culto”, pero por lo menos la entenderé…

Cuando yo me pongo delante de una pantalla para ver una película busco entretenerme, diversión y sobre todo reírme un rato, y en estos aspectos creo que la comedia española le da diez mil vueltas a cualquier comedia de medio pelo hollywoodiense  o a las películas de “humor” que ofrece el cine alternativo… 

La gente tacha este humor de chabacano, bruto, vasto, asqueroso, de mal gusto…bla bla bla (bostezo) y es verdad, pero me aburre que se diga esto una, otra y otra vez después de ver (por ejemplo) cualquiera de las 4 entregas de Torrente. No entiendo por qué lo critican cuando son los primeros que rompen a reír en el cine… ¡Ah sí! Ya me acuerdo, se llama hipocresía.

Le pese a quien le pese el humor español es el mejor. Y al que no se lo crea, le invito a que empiece por ver dos clásicos como pueden ser “La vaquilla” o “Amanece que no es poco”. Cuando vea estas películas que me cuente sus impresiones…

No digo que el cine español sea el mejor en todos los aspectos, pero tampoco creo que todo lo que se hace aquí esté mal. No entiendo la persecución que se lleva a cabo contra casi la totalidad de películas españolas. Hay películas realmente malas, cierto, “Condemor 1” es uno de los ejemplos más claros, pero no creo que haya que generalizar como norma.

Después de esta reflexión, habréis notado mi predilección por las comedias españolas, pero también es evidente que hay dramas, thrillers o películas históricas que realmente merecen la pena. Aún me acuerdo de cómo se me pusieron los pelos de punta viendo “Las 13 rosas”  o como me emocioné con “La lengua de las mariposas”.

Enrique.

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